La operación de aumento de pecho es una de las más populares en la cirugía estética junto con las rinoplastias. Actualmente, también tienen gran importancia las liposucciones y comienza a dejarse notar el aumento de operaciones de glúteos, aunque debido a lo complicada que es esa zona y lo incómodas y dolorosas que pueden ser esas operaciones, no son tan solicitadas como era de esperar.
Los primeros intentos de aumentar el pecho de las mujeres comenzaron a finales del siglo XIX, pero no fue hasta 1962 que se desarrollaron los primeros implantes de mama fiables y modernos. En un principio, estos implantes eran solicitados sobre todo por mujeres a las que se le extirpaba una mama debido a un cáncer, pero poco a poco, fueron popularizándose y en los años ochenta y noventa se convirtieron ya en una intervención común por motivos puramente estéticos.
Pero desde los años ochenta y noventa hasta ahora, las modas han cambiado y mucho. Los noventa supusieron todo un boom en el terreno de los implantes de mama. Las modas imponían senos grandes y llamativos. Se trataba de pechos que tenían una forma excesivamente redondeada y elevada y que podían verse en muchas mujeres famosas. En la calle, las mujeres normalmente optaban por menos excesos y algo más de naturalidad.
Con la llegada de los implantes salinos se comenzaron a desarrollar implantes mamarios con formas mucho más naturales, mucho más parecidas a las formas normales del pecho femenino y más del gusto de la mayoría de las mujeres de la calle. Este tipo de pechos terminaron imponiéndose y muchas mujeres que se pusieron implantes en los años noventa acabaron cambiándolos por otros más naturales con la llegada del nuevo milenio.
A estos cambios también contribuyó la alarma causada por ciertos implantes de silicona que se colocaban en la Unión Europea y que resultaron ser bastante perjudiciales. Muchas mujeres vieron como sus implantes se rompían o perdían su forma. Incluso sin tener problemas y como medida de precaución, tuvieron que pasar por quirófano para cambiar las prótesis de silicona por otras más modernas y seguras.
Hoy, los implantes de pecho son totalmente seguros. Es una de las intervenciones estéticas más sencillas y con menos complicaciones y por eso muchas mujeres confían en ellos para cambiar su imagen y conseguir verse tal y como siempre han deseado ser.